Yo soy padre, soy hijo, soy amigo, soy compañero, soy profesional, soy músico, soy familia, soy hombre y principalmente soy un ser humano como tú.
Desde niño veía a mis padres cómo se esforzaban mucho para sacar adelante la empresa que habían formado, yo acompañaba de adolescente a mi padre para aprender un poco del negocio pero en ese momento no idea de lo que ocurriría pocos años después.
Cuando tenía 19 años, mientras cursaba la mitad de mi carrera universitaria, mi padre murió, y en ese momento mi vida dio un giro importante.
Mi formación como Ingeniero Electrónico me llevó a desarrollarme en la Gerencia de Proyectos de Tecnología, pero luego seguí un camino de emprendimiento y llegué al mundo de los bienes raíces en el cual me desempeño.
Pero, en este viaje llamado vida, necesitaba algo más a nivel personal. Inicié una búsqueda de autoconocimiento y conexión espiritual, y en ese tránsito me encontré con estudios de metafísica, principios espirituales Esenios y hasta que finalmente la vida me llevó a formarme y certificarme como Coach Personal y Organizacional, Máster en Programación Neurolingüística y Facilitador de Dinámicas Grupales Outdoor.
La experiencia de ser Coach y Facilitador me genera satisfacción, ya que me permite integrar ciertos aspectos de mi vida, aportando a la sociedad desde el acompañamiento de personas a lograr resultados extraordinarios. Cada experiencia me genera un aprendizaje y entrega una pequeña semilla de transformación en mi vida, la que me toca cultivar y sembrar en el perfecto lugar para que brinde resultados positivos de crecimiento.
Ser coach no significa ser perfecto ni infalible, tampoco es dar consejos sobre lo que tienen o no tienen que hacer los clientes en sus vidas. Ser Coach es acompañar con una pregunta o un cuestionamiento poderoso que lleve a tomar consciencia poco a poco de las emociones, las creencias limitantes y las conductas que hacen al cliente verse imperfecto y sin los resultados que espera. Es llevarlo a habitar esas emociones, creencias y conductas, conversar con ellas y entender la intención positiva que traen en el fondo. Es llevar al cliente a observar la realidad desde otra posición para obtener el mismos beneficio desde una nueva conducta y resultado aún mejor gestionando inteligentemente las emociones y con una visión clara de existencia.
Disfruto de mis hijos, de mis espacios libres, de tocar el piano y la batería, de un buen café, de un buen vino, de sentir la brisa del mar y ver el atardecer en la playa.